Las casas industrializadas, también llamadas prefabricadas o modulares, se cuentan entre las estructuras más ecológicas y duraderas que existen actualmente en el mercado y ofrecen una amplia gama de ventajas y beneficios.
Sin embargo, también hay una gran cantidad de mitos en torno a ellas. Está muy extendida la idea errónea de que una casa prefabricada es de mala calidad o mal diseño. Este tipo de edificaciones son más sencillas de construir y pueden ser de la misma calidad o incluso superior, y con los mismos materiales que las casas tradicionales.
También pueden ser más bellas estéticamente y con frecuencia cuestan menos, lo que permite una mayor variedad de estilos y formas y acabados de lujo y calidad.
Un paso adelante en la tecnología
Las casas prefabricadas suponen un avance significativo en la construcción de una vivienda desde el punto de vista arquitectónico y tecnológico. Ahorran energía constantemente y reducen la necesidad de mano de obra y materiales de construcción.
Este estilo de construcción de edificios ha avanzado mucho en los últimos años y ya están disponibles en el mercado de casas prefabricadas pasivas o Passive House, es decir, de alta eficiencia.
Estas casas pasivas están diseñadas (desde antes de su construcción) para usar materiales de alta calidad y con diseños innovadores que usan la tecnología bioclimática para ahorrar hasta un 80% en gastos de energía.
Con esto se logran dos cosas. En primer lugar, optimizar los presupuestos familiares con un menor pago en las facturas de electricidad y/o gas; y segundo, se contribuye a tener un estilo de vida más sostenible que preserve al medio ambiente.
Ventajas de las casas industrializadas
La construcción modular presenta múltiples ventajas que se resumen en disminución de costes y tiempos de entrega. Pero además, sus materiales son más sostenibles y amigables con el planeta, al tiempo de que permite ahorrar energía. Veamos con más detalle, cada una de estas ventajas:
Construcción y entrega rápida
Las casas prefabricadas pueden producirse más rápidamente porque no tienen que hacerse en el mismo lugar donde finalmente se ensamblarán.
Esta modalidad de edificación puede fabricarse más rápido sin sacrificar el alto valor y calidad de sus materiales estructurales.
También son mucho más sencillas de montar que las convencionales. Esto acorta los tiempos de construcción y de entrega a sus dueños, lo cual, a su vez, recorta gastos.
Son más baratas
Las casas prefabricadas tienen la ventaja sobre sus rivales de que sus gastos de fabricación y mantenimiento son bajos. Esto se traduce en precios de compra más asequibles.
Pero, esto no implica mala calidad, sino que como se fabrican como una casa modular que se construye por partes y estas se ensamblan en el lugar definitivo de la vivienda, la edificación en serie de estos componentes aminora los costes.
Ecológicas
Las casas prefabricadas o casas industrializadas se hacen con materiales ecológicos que no producen la misma huella de carbono que las casas levantadas con métodos de construcción tradicionales. De hecho, su sistema de construcción aprovecha las bondades de la tecnología bioclimática para hacerlas energéticamente más eficientes.
Todo esto da como resultado que se gaste menos en energía. Por otra parte, si se desea derruir una vivienda pasado el tiempo, todos sus materiales estructurales pueden reciclarse para nuevos propósitos o para formar partes de nuevas edificaciones.
Clientes satisfechos
Al tratarse de módulos prefabricados, el cliente puede comprobar cómo serán los muros, las escaleras y todos los componentes y acabados de su casa, antes de que se inicien los trabajos u obras.
Las empresas de casas industrializadas tienen muestras de todas las partes de estas construcciones para que los futuros habitantes de las viviendas los vean y toquen.
Diseños personalizados
Atrás quedaron los tiempos en que las casas prefabricadas eran todas iguales. Hoy, el cliente puede diseñar desde el principio su vivienda y de una manera sencilla. Asimismo, es factible estar presente y ser partícipe en el diseño de los planos, la elección de los materiales y la distribución del espacio porque el proceso de construcción no es tan complicado como el de una vivienda normal.