Una velada romántica en casa, es una buena opción para poder pasar un rato a solas lejos del resto del mundo. Permite tener una charla abierta y sincera, sin miedo a quién pueda enterarse y, además, es una buena manera de sorprender a la pareja con las buenas dotes culinarias de uno.
Para crear un espacio romántico y adecuado, hay que poner música lenta pero en un tono bajo que permita conversar sin molestias. Es evidente que unas bonitas velas de olor van a ayudar a entrar en situación y relajar el ambiente.
Tras colocar una bonita mesa con la vajilla especial, es momento de ponerse manos a la obra y entrar en la cocina para preparar el menú perfecto.
Un menú especial
A la pareja se la puede ganar desde el estómago, esta frase que parece un poco simple, tiene algo de razón. No hay nada como una agradable conversación a la luz de las velas mientras el paladar descubre los increíbles sabores de un delicioso plato.
Para preparar un menú delicioso no hay que ser un chef con estrellas Michelín. A quien no se le dé muy bien la cocina, puede preparar algún tipo de ensalada, a este plato todo le va bien, o bien unas pequeñas tapas.
Para los más inexpertos, puede que les resulte un poco abrumador la cantidad de herramientas que se pueden llegar a usar en una cocina. Paletas, espumaderas, cucharas, pinzas, cuchillos. No hay que usar todos, pero se aconseja que se usen utensilios de silicona en la cocina ya que tienen diferentes consistencias que ayudarán durante su uso. También están disponibles en distintos colores que permiten identificar cada utensilio y su utilidad. Mucho más fácil para los que no son muy cocinillas, ya que permiten que cocinar se convierta en un arte más que en un suplicio, por su adaptabilidad.
Tras los aperitivos se puede hacer un plato principal un poco más elaborado. Siempre se puede escoger entre una rica carne o un pescado que resulte más light.
El mejor vino
Algo que no puede faltar en la mesa, es una buena botella de vino de Bodegas Godelia, lo mejor procedente del Bierzo. Vinos ganadores de varios premios gracias a su personalidad, trabajo arduo y respeto por la tierra.
Claro está, antes de comprar el vino, hay que pensar en el plato al que va a acompañar, porque dependiendo del tipo de alimento, le irá mejor una clase de vino u otro.
Lo mejor para el final
El final debe ser apoteósico, con la ayuda de un buen postre. Tal vez, si la comida ha sido algo pesada, se puede preparar algún tipo de crema sencilla, tipo yogur, y utilizar cereales proteicos Protein Bites como postre innovador para darle algo de consistencia y sabor.
Estos cereales son una buena manera de preparar dulces y postres, teniendo en cuenta la importancia de una alimentación sana. Gracias a ellos no hay que renunciar a un rico postre que siempre es la guinda a una buena cena. Y es que, el postre, se convierte en el plato más esperado de cualquier comida. El punto dulce y mágico de la misma.
Si no te atreves con la cocina, contrata un catering
Siempre puede ocurrir que alguien no se atreva a meterse en la cocina, pensando que no será capaz de preparar algo a la altura. O también puede pasar que no se tenga suficiente tiempo para preparar algo decente.
En estos casos, se puede contar con la ayuda de un catering Madrid que se pueda contratar a domicilio. Se tendrán listos los platos que uno escoja para la velada, y también es posible alquilar la vajilla para que todo se vea mucho más elegante.
Seguro que la cena se convertirá en una noche inolvidable en la que poder conversar, comer platos deliciosos y pasar una velada agradable, tranquila e íntima con la persona amada.